viernes, 31 de diciembre de 2010

Juan-Eduardo Cirlot - El libro de Cartago






Oh, Baal. ¿Quién soy yo? Soy un barquero que ha llegado de otra edad; que ha regresado de otras islas, que ha navegado sin creer en la realidad de la aniquilación de las costas patriarcales. He visto las puertas arruinadas, llenas de topacios; he visto los palacios calcinados y en mis ojos sus muertes sonreían como yo te sonrío a ti.

Juan-Eduardo Cirlot, El libro de Cartago, Igitur, 1998

domingo, 26 de diciembre de 2010

sábado, 25 de diciembre de 2010

Félix Francisco Casanova - Siempre supe que estoy condenado






Siempre supe que estoy condenado al infierno
irremisiblemente. Por ejemplo, cuando cruzo las
calles con medigos en cada esquina, les lanzo mis
monedas... Pero éstas vuelven a mí sin tocar sus
manos.

Félix Francisco Casanova, Cuarenta contra el agua, Demipage, 2010

domingo, 19 de diciembre de 2010

José María Álvarez - El impresor que vivía en la llamada Cuesta del Maestro Francés






Hecho de carnemomia

–Miguel de Cervantes–

Ahora ha enfocado su atención en las arañas y ha cazado varios ejemplares bastante grandes que ha encerrado en una caja. Las alimenta con moscas y el número de éstas está disminuyendo sensiblemente

–Abraham Stoker–

Me ha molestado usted, y, por desgracia, soy tan nervioso que necesito mucho tiempo para volver a orientarme

–Franz Kafka–

Dedicado
a
Ferdinand Joseph la Menthe


Conocido por toda Cartagena,
el impresor Matías bajaba diariamente
su calle, saludando,
abrochándose a veces la bragueta,
hasta el viejo café donde tomaba
su escueto desayuno con anís.
El impresor Matías trabajaba
solo. Su buen hijo
en un principio hijo con guardapolvos,
ya no viene al taller, casóse, vive
en Barcelona, y nunca escribe.
El impresor Matías ha olvidado
toda la historia. Bebe, paga
su copa. Y después marcha
como el rey de los cuentos, al trabajo,
derecho y muy peinado, quiero decir
con fijador sus cuatro pelos.
Hemos de remontarnos al Cantón.

José María Álvarez, Museo de Cera, Visor, 1993

sábado, 18 de diciembre de 2010

Julio Martínez Mesanza - Nunca he visto gozosa a la discordia






Nunca he visto gozosa a la discordia.
No conozco el olor que tiene el campo
después de la batalla. Nunca he visto
caballos sin jinete entre las picas
vagar y entre los muertos. No conozco
la voluntad de ser invulnerable
ni el estupor que nace con la herida.

Julio Martínez Mesanza, de Europa, Renacimiento, 1986

sábado, 11 de diciembre de 2010

Tomas Tranströmer - De marzo del 79






CANSADO de todos los que llegan con palabras. palabras,
pero no lenguaje,
parto hacia la isla cubierta de nieve.
Lo salvaje no tiene palabras.
¡Las páginas no escritas se ensanchan en todas direcciones!
Me encuentro con huellas de pezuñas de corzo en la nieve.
Lenguaje, pero no palabras.

Tomas Tranströmer, de La plaza salvaje, El cielo a medio hacer, trad. Roberto Mascaró, Nórdica Libros, 2010

lunes, 6 de diciembre de 2010

Sueño de Polífilo







Si deseas, lector, conocer brevemente lo que se contiene en esta obra, sabe que Polífilo cuenta en ella que vio en sueños cosas admirables y que la llama, con vocablo griego, lucha de amor en sueños. En ella finge que ha visto muchas cosas propias de la Antigüedad y dignas de memoria. Y describe punto por punto, con palabras apropiadas y estilo elegante, todo lo que dice haber visto: pirámides, obeliscos, enormes ruinas de edificios, las distintas clases de columnas, su medida, los capitales, basas, epístilos o arquitrabes rectos, arquitrabes curvos, zóforos o frisos y cornisas con sus ornamentos. Un gran caballo, un elefante tremendo, un coloso, una puerta magnífica con sus medidas y sus ornamentos, un espanto, los cinco sentidos en cinco ninfas, un baño egregio, fuentes, el palacio de la reina que es el libre albedrío, un banquete regio y superexcelente; la diversidad de joyas o piedras preciosas y su naturaleza; un juego de ajedrez a modo de baile con tres medidas de sonido. Tres jardines: uno de vidrio, uno de seda, uno en forma de laberinto, que es la vida humana. Un peristilo de ladrillo, en cuyo centro estaba representada la Trinidad en figuras jeroglíficas, es decir, sagrados relieves egipcios. Las tres puertas y en cuál de ellas se quedó, y cómo estaba vestida Polia y cuál era su talante. (...)

Francesco Colonna, Sueño de Polífilo, ed. Pilar Pedraza, Barcelona, Acantilado, 2008

sábado, 4 de diciembre de 2010

Omar Pimienta - Insomnio






Pago todos esos días de pañales
despertar para comer
volver al sueño en aquellos brazos tibios

Las burguesas tardes con siesta al sol calentándome
el viento a la ventana las ganas perdidas
los remiendos del tedio

Pago todas aquellas noches en que me quedé dormido a tu costado
sobre tu vientre sin esperarte

en esta vigilia de cobijas abrasivas
caminatas tartamudeos de ojos
pago todos los velorios de los que me fui temprano

Omar Pimienta, de Naufragio en Altanoche, en www.omarpimienta.com