jueves, 24 de septiembre de 2009

Rafael Cadenas - Ars poética






Que cada palabra lleve lo que dice.
Que sea como el temblor que la sostiene.
Que se mantenga como un latido.

No he de proferir adornada falsedad ni poner tinta dudosa ni
añadir brillos a lo que es.
Esto me obliga a oírme. Pero estamos aquí para decir verdad.
Seamos reales.
Quiero exactitudes aterradoras.
Tiemblo cuando creo que me falsifico. Debo llevar en peso mis
palabras. Me poseen tanto como yo a ellas.

Si no veo bien, dime tú, tú, que me conoces, mi mentira, señálame
la impostura, restriégame la estafa. Te lo agradeceré, en serio.
Enloquezco por corresponderme.
Sé mi ojo, espérame en la noche y divísame, escrútame, sacúdeme.

Rafael Cadenas, Obra entera (1958-1995), Pre-Textos


3 comentarios:

anamaría hurtado dijo...

Navegar en este blog es una delicia,al azar,con las velas hacia donde sople el viento. Hallar en este mar a Cadenas me trae la expansión de encontrar una Aurora. Siempre buscando la palabra, buscándo se, escrútame, sacúdeme, siempre un alegato místico...
Gracias por hacer navegable este extenso mar
saludos,
anamaría

Durandarte dijo...

Cadenas es exigente y generoso. Su búsqueda es la nuestra:

"La palabra no es el sitio del resplandor, pero insistimos, insistimos, nadie sabe por qué". R.C.

Gracias a ti por la generosa lectura.

Saludos

anamaría hurtado dijo...

un dato superfluo: Cadenas y yo hemos nacido frente al mismo mar