jueves, 22 de noviembre de 2007

El collar de la paloma

Y todavía he conseguido algo más completo, que es comparar cinco cosas con otras cinco en un mismo verso, como puede verse en el siguiente poema:

Me quedé con ella a solas, sin más tercero que el vino,
mientras el ala de la tiniebla nocturna se abría suavemente.
Era una muchacha sin cuya vecindad perdería la vida.
¡Ay de ti! ¿Es que es pecado este anhelo de vivir?
Yo, ella, la copa, el vino blanco y la oscuridad
parecíamos tierra, lluvia, perla, oro y azabache.


Inb Hazm de Córdoba, de El collar de la paloma



No hay comentarios: